Luego de dos meses y medio de rodaje, se terminó de filmar la cinta Motocross en Mazatlán, Sinaloa. Con el ?bautizo? cinematográfico de Aarón Díaz, los actores Daniel Martínez, Aarón Hernández, Irán Castillo, Ximena Sariñana, Verónica Toussaint y Plutarco Haza festejaron el término del proceso de filmación.
Con un día de anterioridad de la fecha prevista para su final, la producción de la película que tentativamente lleva ese nombre filmó la última escena en la ciudad de Mazatlán, Sinaloa.
En medio de una pista de motocross, ubicada en la zona dorada de Mazatlán, el director Salvador Cartas, los productores Fernando Sariñana y Pedro Cueva, así como todo el equipo del filme, se mostraron muy contentos de cerrar esta etapa del filme.
?Esto es como un sueño hecho realidad pues desde niño siempre tuve la obsesión de hacer cine y terminé siendo director de fotografía; entonces ahora, como director de mi primera película, me siento más que satisfecho, aunque ahora viene la parte más difícil: la edición?, dijo Cartas. El filme, que tendrá una inversión de un millón 400 mil dólares, comenzó su filmación en marzo pasado en esta misma ciudad y luego se trasladó a Zacatecas y el estado de México.
La historia, que surgió a partir de un accidente que sufrió Cartas practicando este deporte extremo en moto, narra la búsqueda de dos medios hermanos por destacar en el deporte al mismo tiempo que buscan el lugar y significado de sus miedos y su vida en general.
?Esta cinta refrescará la pantalla del cine nacional, pues además de que aborda el género de la acción, muy poco visto en cine mexicano, es un road movie que, como todo viaje, lleva un mensaje de reflexión sobre ciertos aspectos de la vida?, comentó Haza.
El filme, que espera ser estrenado a finales del verano de este año, no tuvo muchos contratiempos, ni accidentes que lamentar.
Por el contrario, se terminó de filmar un día antes de lo previsto y sólo con un par de lesiones leves que sufrieron los corredores profesionales de motos: Yuri Jiménez y su asistente Antonio Martínez, quienes participaron como extras de los actores que protagonizan la película. En su momento, casi al final de las escenas faltantes, Díaz fue ?bautizado? por el equipo de producción.
Además de sufrir la molestia de la caracterización que le exigió ensuciarse con la tierra de la pista, fue literalmente bañado con una cubeta llena de agua, fruta y verduras podridas, pintura y otros elementos que hicieron que el actor casi devolviera el estómago.
Después del susto y de enjuagarse con agua, mostró una sonrisa y agradeció a los compañeros su apoyo en el que será su debut cinematográfico.